10.12.11

Adaptaciones

Acaban de poner en cuatro la película "¿Bailamos?" que es una versión americana de la del mismo nombre japonesa. De esta película me llama poderosamente la atención que muchas de las situaciones, y sobre todo de las conversaciones chirrían muchísimo; sin embargo tendrían perfecto sentido si uno imagina que los personajes son japoneses. Desde mi punto de vista fracasó totalmente la adaptación. ¿Cómo debe adaptarse una obra?

He tenido esta discusión en muchas ocasiones con diversas personas, sobre todo a la hora de encarar un montaje teatral, que a fin de cuentas es una forma de adaptación -pasas desde el mundo del texto acotado a la auténtica realidad de carne y hueso. Algunos directores opinan que es fundamental respetar al autor, manteniendo al pie de la letra lo que dicen las acotaciones del texto y montando un escenario lo más detallado posible, que sea un prolijo conjunto de detalles de 'época'. A mí eso me parece un disparate. Siempre he pensado que lo primero que hay que hacer al hacer un montaje teatral es desechar al autor. Ya hizo su trabajo, y está genial, pero en ese momento ya carece de importancia. Debes beber la obra, sumergirte en ella, destilarla y finalmente recrear su espíritu con el espacio que tienes y los actores que puedas conseguir. En definitiva tienes que reconstruirla por completa en el nuevo contexto espacial, social y temporal, incluso si eso significa reescribir algunos diálogos o dejar mano libre a los actores a que los reconstruyan ellos mismos.

En el caso de la traducción de la literatura no tengo muy claro si se trata de lo mismo o no. Por una parte me parece evidente que la traducción de una obra nunca será la obra original, pero, ¿quién puede hacer un ejercicio de reconstrucción equivalente al ejemplo de montar la obra de teatro? Tendría que ser un escritor, con todas las letras, un escritor de la misma altura del escritor original, de su misma calidad y a ser posible con un estilo similar. Algo realmente difícil, imagino.

Ya en los artículos de mi viejo blog, en los que hablaba de 'interactivizar' una obra literaria, dije que no puedes conservar la obra en sí, que hay que recrearla. Mantengo mi opinión; pero, ¿qué pasa con las adaptaciones de viejas aventuras? Hemos tenido bastantes en los últimos tiempos como esta, o esta, o esta. Algunas de ellas las estaba esperando con verdadero deseo, y algunas fueron para mí una sorpresa agradable... pero todas me decepcionaron, en particular esta.

¿Por qué? Precisamente por lo que he estado diciendo. Un buen 'remake' de una aventura debería ser una reconstrucción de una obra en el nuevo contexto cultural (y en este caso tecnológico) y no meramente una 'transliteración' del contenido a las nuevas plataformas, una recompilación de los fuentes extraídos del PAWS con Superglus, con cierto remozo de los gráficos manteniendo el aspecto añejo del original.

El mundo ha cambiado, nosotros hemos cambiado y la tecnología a cambiado. Cuando alguien se plantee renovar esa vieja obra que tanto le gustó en su momento, espero que sea realmente valiente y la haga suya de verdad, que la descomponga en sus componentes, que la digiera en su esencia y que nos proporcione algo realmente nuevo y acorde a los tiempos.

7 comentarios:

Unknown dijo...

Totalmente de acuerdo. En el cine tenemos muchos ejemplos de lo que sería un remake

Para mi, cuando se da el caso de que solamente se le da un lavado de cara, se trata entonces de una reedición (la digitalización o el HD de la saga Star Wars) no de un remake (como sería El Planeta de los Simios, Ocean's Eleven, etc etc).

Al-Khwarizmi dijo...

En el caso de las películas, estoy de acuerdo: ver una película en color y con otros actores no me aporta gran cosa sobre ver la original, más antigua, si no cambia sustancialmente la trama.

En el caso del teatro, no lo veo tan claro: creo que ver una representación de una obra de Shakespeare lo más fiel posible a como la ideó su autor es muy interesante. No digo que sea la única manera de hacer las cosas, por supuesto, las reinterpretaciones también pueden ser muy buenas. Pero creo que ambas cosas tienen su interés.

En el caso de las aventuras, entra en juego el factor técnico. Una aventura de Spectrum hoy por hoy nos resulta a muchos injugable, no necesariamente porque la trama sea mala sino por factores puramente técnicos. Así, podría plantearse un remake con dos objetivos: o bien reinterpretar la obra, o bien simplemente que la obra tal como era resulte jugable y agradable hoy. Aunque es bien sabido que no soy muy fan de los remakes, ambos objetivos me parecen legítimos.

Mastodon dijo...

Yo distinguiría lo que es una adaptación dentro del mismo medio, de una conversión "inter medios".
En el primer caso no le veo mucho sentido (vale, yo hice una, ¿pasa algo?), salvo en el caso de una flagrante carencia de la origial por las limitaciones técnicas, caso de las viejas aventuras de Spectrum, o en el caso de traducciones que acerquen la obra a más personas. En un remake de una aventura debería efectivamente aprovecharse los nuevos recursos, de otro modo parecería de alguna manera incomprensible "capada" intencionalmente.
En el caso de conversión a otro medio me parece interesante como forma de explorar una idea mediante otra forma de experiencia. En ese caso el buen autor deberá explotar al máximo las posibilidades que ofrece el nuevo medio y no ceñirse a ser "fiel" reflejo de la obra original, que es algo que suelen dar como virtud en las miríadas de películas basadas en novelas y que a mí sinceramente me parece un despilfarro, y no sé si por la peli o por la novela original, que muchos autores ya escriben con la idea de sacar la película.
La novela para mí es descripción, escenario y sobre todo personajes, el cine es fotografía, diálogos y si me apuras música. Es fantástico cuando un autor sabe entender esta idea, aunque no muy habitual.

Ada dijo...

Excelente película "Shall we dance?" en su versión original (japonesa), en la que no procedía -ni de coña- un remake americano. Muy bien planteada la idea del ejecutivo japonés que tras la jornada laboral acude a una academia de baile; algo que chocaría notablemente en la cultura japonesa pero no en la americana. De ahí la no procedencia del remake.
Lo mismo con películas de sci-fi en b/n en las que se han quedado obsoletas las historias de los clásicos invasores extraterrestres en sus platillos voladores.
Ya sé que el post no va de esto pero me ha llamado la atención el tema de los remakes (cinematográficos); soy aficionada a ellos ya que siempre me pica la curiosidad, como por ejemplo: "La guerra de los mundos", "Invasión a la tierra", "Déjame entrar", "Flash back, el apartamento", "Abre los ojos" y así un largo etcétera.
¿Por qué ese empeño por hacer un remake en el que casi nunca mejoran la película original? Si casi siempre es un clon de la historia original sólo que cambian la nacionalidad, el director y los actores.

Mastodon dijo...

Sep, me vienen un par de ejemplos: "The ring", realmente decepcionante, y "Déjame entrar", correcta pero innecesaria.

Comely dijo...

Respecto a lo que comenta Ada de los remakes innecesarios, hace poco tuve una conversación con una amigo estadounidense que se dedica profesionalmente al montaje cinematográfico. Según él, el público americano no está acostumbrado a las películas dobladas o subtituladas, de ahí que saquen sus propias versiones, que corresponden mucha veces plano por plano al original. De hecho, el número de remakes de películas originalmente en inglés es mucho menor y responde a otras causas, así que imagino que tendrá razón.

Ada dijo...

Muy interesante, Comely; desconocía ese dato. Siempre había pensado que los remakes correspondían a la simple necesidad de llevarse los yankis la vanagloria.
Estoy de acuerdo con Mastodon con "The ring"; el remake además de decepcionante al igual que "Shall we dance?", se me hacen extraños.

Ada.